ya ves... vivo rodeada de lujo.
Y va y me dice
-¿eres Leo? No lo pareces
-¿..? Pues no sé, no estoy muy puesta en horóscopos, a lo
que además mi mente añadió “y me importan una puta mierda (perdón)” ¿Por qué?
-porque a los Leo os encanta rodearos de lujos, a ti no
parece importarte…
-¿A mí no? ¡Claro que sí! Defíneme lujo, o mejor te lo
defino yo:
Si un lujo es que una cadena de oro y diamantes rodee mi
cuello, pues me quedo con esas manos que suavemente se posan en él y lo empujan
levemente porque unos labios buscan los míos, porque créeme esa sensación que
eriza cada centímetro de la piel es más difícil de encontrar de lo que crees.
Si un lujo es una “casa” de esas de ensueño…me quedo con lo
que la llena, el amor, los gritos y peleas de niños, olores, música, ese llegar
y ponerte cómoda, ese compartir cena para comentar las mejores jugadas del día,
y reírte hasta de lo que no tiene ni puta gracia..¡Ah! ¡El hogar es un lujo! La
casa es el envoltorio, un envoltorio triste si esta vacía.
Si un lujo es tener un “cochazo” te diré que el verdadero
lujo esta en disponer de ese tiempo para que me lleve a todos los lugares que
me hacen feliz, una playa, una sierra…conduciendo o de copiloto con los pies en
el salpicadero, escuchándole cantar y mirándome de reojo.
El trabajo es un lujo, cierto, pero lo que es un verdadero
lujo es dedicarte a lo que te gusta, lo que te hace feliz, tanto, que al
terminar el día cansada hasta más no poder, sonríes satisfecha, ¡esa satisfacción
sí que es un lujo!
Tener los mejores tratamientos, los mejores médicos es un
lujo, pero el verdadero lujo esta en no necesitarlos jamás.
El dinero dices? Vale, de acuerdo, nos da la oportunidad de
cubrir nuestras necesidades, pero el verdadero lujo está en saber donde hay que
parar, enterrar esa competencia por poseer más que al final solo te lleva al
cansancio, frustración y endeudamiento, una vez enterrado esto, una vez cubiertas las
necesidades, encontrar esas actividades placenteras que te conducen hacia el
tan ansiado camino de “calidad de vida” ¡ahí está el lujo!
¿Una habitación con vistas al mar? ¡Joder! claro que me
gusta, pero el verdadero lujo esta en ese abrazo con cariño que hace que el mar
sea “tan azul”
Pero no te quiero cansar, porque acabare hablando de todos
los pequeños placeres como, empezar a escribir, recibir una nueva inspiración y
no poder parar de jugar con las palabras…cocinar con y para mis seres queridos…conversaciones
bajo un cielo estrellado…llorar y que “esa persona” te arranque una extraña
mueca que quiere ser risa sin dejar de ser llanto, y la mueca va mutando en
risa, y la risa en carcajadas, y las carcajadas nuevamente en llanto…leer un
libro a la sombra de la higuera que te lleva a mil mundos y a la magia de esa
mariposa que se posa en mi pierna…pero no te quiero cansar…
Y los horóscopos me siguen importando una …… ¡eso¡ pero sí,
me gustan los lujos, ya ves, vivo rodeada de ellos.
Apreciar cada pedaço
ResponderEliminarsentir o valor de cada bocado
somar sorrisos em cada canto
e ter o riso das estrelas
o riso de estar vivo.
;)
EliminarEl verdadero lujo de esta vida es todo aquello que no da felicidad y a veces no se trata precisamente de lujos físicos. Un saludo. Me encanto tu historia.
ResponderEliminarGracias¡¡
EliminarUn abrazo
Es un lujo leerte.
ResponderEliminarTe sonrío con el Alma.
Precioso resumen de la vida lujosa !!!! Cariños mil. Me encantó !
ResponderEliminarGracias Ana I. Un abrazo.
EliminarMaravilloso escrito sobre la vida, eso si que es un lujo leer este escrito, me ha gustado mucho. Un abrazo
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