COLLAGE (1ª Parte )
Final de enero, con
dudas pero dispuesta a desnudar mi alma hilvanando palabras, madrugando, el
aroma a café, el beso de buenos días, la radio me acompaña…dispuesta a salir al
mundo pisando fuerte, una ilusión infinita por las cosas cotidianas.
El corazón sigue latiendo, no quiere
perderse el goce del momento, dispuesta a cuidar la sonrisa de los que me
acompañan, instantes de emoción… ¡no
sacrifiquen los momentos!
Subiendo al tren, sin prisa por
conocer el destino, disfrutando del paisaje y fraguando historias, apoyando la
cabeza en la amplia ventana, la imaginación se libera, anhelos, fantasías, encuentros, esperanzas, despedidas
a los que bajan, sonrisas a los que se incorporan.
Como
en una montaña rusa, en las subidas note correr la
sangre por mis venas y mis ojos se llenaron de toda la luz de los amaneceres, y
al respirar inhale un trozo del paraíso.
En las bajadas, de mis ojos se
deslizaban lágrimas del azul de todos los mares, y al posar los pies en la
tierra, mis piernas que tan frágiles parecen sostenían con fuerza toda la
realidad que me rodeaba permitiéndome erguirme y estirarme de nuevo.
Llegue a una casa que respira vida, de
largas sobremesas, de tardes de lectura, de bailes de noche en primavera…
Febrero
empezó rescatando de mi mente el primer año en la universidad con ese abanico
que aireaba un buen puñado de posibilidades e ilusiones y gritando una vez más ¡dejemos de bostezar! Fisgoneando en esa curiosa casa de mi abuela, de tinajas
de vino ya tan inexistentes como las cartas de desencuentros… y así di un salto
al precipicio y por increíble que parezca el aterrizaje fue suave, levantándome
sonriéndole al presente y con pasos firmes para seguir escribiendo el guion de
mi futuro.
¿Olvidar y empezar de nuevo? Si me dan a elegir…prefiero seguir avanzando,
sin olvidar, guardando lo bueno y lo menos bueno… porque ¡el amor cuesta! Cuesta
dejar de pensar en “yo” para pasar al “nosotros” e intentar como dice la canción
que el lunes parezca un sábado… aunque no quedemos el día de San Valentín en lo
alto del Empire State como Cary Grant y Deborah Kerr.
Un día, como otro cualquiera descubres
que el único rival que tienes son tus propias debilidades, y este
descubrimiento te da las armas para luchar, que un sueño es un tesoro, que como
el amor hay que cuidarlo, dedicarle tiempo…tiempo en el que se van acumulando
años de juventud.
Y
terminar el mes con un credo (Creo en la personas que están, cuidan, hacen,
sostienen, escuchan, abrazan, celebran, intentan, necesitan..) y cantando con
el cepillo del pelo a modo de micrófono, Volandoooo voy, volandooo vengooo
En un abrir y cerrar de ojos empezó marzo con una alabanza al jodido mundo
y bendita vida, o al bendito mundo y jodida vida o bendito mundo y bendita vida,
para pararme y preguntarme ¿Qué intentamos? Lo que no intento es “ser esa chica
que va tan mona y es como dios manda”
Di un paseo recordando, como pensábamos
que seriamos inseparables, inocentes e ignorantes de que el tiempo y otros
quehaceres nos alejarían, para dar paso a una leyenda en la que el intendente
golo se encargo de matar todo lo que podríamos compartir… y este mes termino
perdiendo los miedos, anhelaste saber cómo
huele y sabe el café en mi amanecer, y en ese grito de Búscame cogiste la
batuta para marcar el tempo de maravillosas sensaciones, cerrando los ojos, dejándonos
llevar…
Y así Abril
empezó con duende, rindiéndose ante nuestros sueños, superando la realidad a la
ficción… ¡unos minutos de silencio, por favor!
De vuelta nos recibió la primavera en el jardín, el huerto por regar,
las gallinas, y el café en mano saludando al perro y al día… ese día en que escribí
“Sueña con sus sueños” (sin duda uno de
mis favoritos), para no olvidar nunca que hay sueños que nacen para hacerse
realidad. Y final de mes me enseño que
no necesitamos emociones fuertes para sentirnos mejor que bien, que a veces me
pierdo, no me encuentro pero… ¡Aquí estoy, aunque a veces se me olvida!
Escribir un blog no te cambia la vida... pero... unos recortes de reflexión, otros de creatividad, unos cuantos de imaginación... y la ilusión de encontrarte contigo mismo de una manera diferente. ;)
Maravilloso como siempre.
ResponderEliminarEsta claro que un blog no te cambia la vida pero le da un brillo y un toque especial a veces incluso cambia en la manera que se ven las cosas o en la forma que te ven. un recorte no es mas que un pedacito de un todo que se muestra o está por mostrar....
Besitos y achuchones de domingo para que no desaparezca jamás esa ilusión
Gracias Jaime. Achuchones¡¡¡
EliminarGenial, me ha encantado. Lleno de emocones sinceras.
ResponderEliminarPrecioso.
Graciassss. Besillos
EliminarPreciosa conclusión , un blog te da ilusión y saca lo que tienes dentro de tu alma y lo dispones en poesías, relatos, historias y aquí estará alguien que los lea.
ResponderEliminarUn saludo
Y yo encantada de que te guste, de que me leas, nos leemos. Un abrazo
EliminarMe encanta, a parte de la vida que le das y que contagias. Eres buena escribiendo, transmites. Y es cierto no te cambia la vida, pero te ayuda, encuentras amigos, momentos, compartes instantes y llenas de magia minutos y encuentras consuelo, palabras que te hacen pensar, reflexionar, despertar... Y te permite ser tu misma. Besitos.
ResponderEliminarGracias una vez mas, Marijose por tus comentarios. Un abrazo¡
EliminarInteresantes reflexiones en trazos bien definidos con colores muy vivos que alegran el alma. Gracias por tu mirada tan particular. Espero crearme el tiempo para seguir leyéndote.
ResponderEliminarGracias por leerme, es un resumen de mis primeros meses de blog, retazos. Un abrazo¡
EliminarPrecioso y muy interesante forma de animar a la gente a iniciar en apuntes que se volverán en hermosos escritos de diferentes experiencias y vidas. Estaré atento para leerte.
ResponderEliminarGracias Luen. Un abrazo¡
EliminarMe ha encantado este resumen en el que transmites las emociones de tus primeros meses de blog, y la conclusión a la que has llegado al final y con la que coincido plenamente. Gracias por compartir con nosotros sentimientos tan bien expresados.
ResponderEliminarUn beso enorme, Ana
Gracias a ti.
ResponderEliminarBeso enorme de vuelta, Chari.
Me agradó bastante tu frase de cierre. Definitivamente el escribir un blog es un momento para estar con uno mismo y esta experiencia en algunos momentos suele ser emocionante.
ResponderEliminarFelicictaciones Ana.
Mil Gracias Asterion.
EliminarUn abrazo.