LA VIDA ES PARA CRECER Y APRENDER
Ángeles estaba escribiendo un whatsapp
a su nieta, ella que hacía apenas un año
no sabía leer ni escribir.
Recordaba con algo de tristeza aquella
niña que fue… menuda, de piel morena y pelo negro casi siempre recogido en una
cola de caballo o en una trenza, con los ojos tan negros como tímidos y
curiosos, ser la única mujer de cuatro hermanos le condiciono la manera que
ella debería de vivir, eso y la posguerra que les dejo los vientos de frio, hambre, desprecio y silencio
de una guerra, a lo que se unió que el régimen apartara a las mujeres de la
cultura, para ella esto era lo de menos, ir a la escuela para aprender a ser
una buena ama de casa, madre y esposa no le interesaba (montones de
ilustraciones con mujeres sonrientes con la fregona en la mano lo
avalaban), lo que realmente se lo impidió
fue la pobreza y el machismo que la rodeaba.
No aprendió a leer aunque obtuvo un máster
en sortear la miseria, fregando, lavando, cocinando y el escaso tiempo que quedaba
para el ocio lo dedicaba a coser, así es como en su casa era poco más que una
empleada domestica. Nunca leyó, ni nadie le leyó cuentos antes de irse a
dormir, ni escribió su nombre en un corazón dibujado en cualquier trozo de
papel.
Con catorce años se puso a trabajar
como empleada domestica de otro hogar, a los dieciocho su casamiento no le
trajo mas libertades, seguir sirviendo haciéndose cargo de un marido y criar tres
hijos y una hija, todos estudiaron, de eso se encargo ella misma trabajando
todo el día y gran parte de la noche, cuando su hija le decía, madre, ¿Por qué
no sale un rato a divertirse? ella
enhebrando la aguja con la vista cansada y las manos encallecidas, le sonreía
sin dejar que su boca transformaran en
palabras lo que su mente pensaba ¿Cómo se divierte una si tiene que trabajar de
día y de noche toda la vida para tirar pa`lante?
Cuando enviudo y los hijos se
ausentaron, se dio cuenta de que no solo echaba en falta un marido, le faltaban
muchas cosas más. Se sentía extranjera en aquel lugar, sin educación, alejada
de la sociedad… solo veía como un muro se iba levantando imposible de
franquear, hasta que un día recordó una frase: “La vida es para aprender y
crecer”
Y así llego una tarde, bendita tarde, a la escuela
de adultos, con un poco de vergüenza pero con mucha ilusión. Alguien podría
decirle que de que serviría leer, entender un libro en un mundo como el suyo,
de poco le importaba eso, el reto era consigo misma. Desde que aprendió a leer
todo cambio, la manera de pensar, de conectar con la gente, ahora no solo podía
hablar también dialogar, no es que antes no lo hiciese pero le faltaba algo, la
capacidad de conocer.
Termino el whatsapp: “ven a probar te
el vestido. Besos” Le dio a enviar con una gran sonrisa formada por todas las
sonrisas ausentes de su vida.
Hoy 8 de Septiembre es el Día
Internacional de la Alfabetización.
En Andalucía aun hay unas 250.000
personas completamente analfabetas.
En España 720.000 aproximadamente, de la que unas
500.000 son mujeres.
Un informe de la Unesco afirma que
existen en el mundo más de 781 millones
de analfabetos, de los cuales 500 millones son mujeres. Irina Bokova recuerda: “una simple verdad: la alfabetización cambia la vida.”
Los que me estáis leyendo, o los que
no pero podrían hacerlo ¡valorad la suerte que tenemos!
Un país no es
más fuerte por el número de soldados que tiene, sino por su índice de alfabetización.
(Malala Yousafzai)
Cierto, cambia la vida, y por eso existen muchos países donde no interesa tener un pueblo alfabetizado.
ResponderEliminarHay una película de Robert Deniro donde el personaje no sabe leer, le notifican por carta de la muerte de su padre y el pobre ni se entera, lee la carta años más tarde cuando la mujer de la que él se enamora lo enseña. Tu relato me ha recordado esa fantástica película.
Un placer pasar por tu casa de letras.
Un abrazo.
No he visto la pelicula, pero lo haré. Gracias por pasearte por mis letras.
EliminarUn abrazo.
Es verdad que mucha gente no ha tenido la oportunidad de leer. Pero la vida le ha enseñado que nadie le puede engañar. El saber no ocupa lugar, no debería haber nadie sin la oportunidad de aprender a leer. Un abrazo
ResponderEliminarPor suerte cada vez son los menos, aunque aún queda mucho camino. Un abrazo.
EliminarLeer no es una función vital para los seres humanos como lo es el respirar o el comer, sin embargo cuando falta, cuando no podemos leer es como si dejásemos de existir...
ResponderEliminarRespirar y comer también lo hacen los animales ¡Diferenciémonos! Besos.
EliminarNecesito leer todos los días. Me ha gustado mucho leer hoy tu escrito y deseo que esas cifras algún día no existan. Besos Ana y "palante"
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